Los hogares en promedio tienen 100 clases de insectos distintos y en el verano este número aumenta. Muchos pueden afectar nuestra salud como las moscas y hormigas pero otros, como la araña de rincón, pueden ponernos en riesgo.
Hormigas: Habitan casi en todo el mundo y la especie más habitual es la hormiga argentina, una plaga incontrolable al día de hoy.
Moscas: Son muy comunes y peligrosas, contagian enfermedades a través de sus patas al ponerse sobre nuestros alimentos. Viven entre la materia orgánica en descomposición, como la basura y el excremento.
Arañas: Temidas por muchos, silenciosas y discretas, viven en todas las casas. La más peligrosa es la araña de rincón, responsable de una dolorosa mordedura que provoca una considerable herida e incluso la muerte.
Mosquitos: Responsables de generarnos grandes molestias, están presentes en todos los ambientes especialmente donde hay humedad.
Polillas: Durante el verano aumenta su presencia en el hogar, pudiendo dañar irreparablemente la ropa.
Cucarachas: Están rodeadas de bacterias que favorecen la aparición de gérmenes, alergias y asma.
Garrapatas: Son pequeños artrópodos que no solo succionan sangre sino también transmiten infecciones, como el tifus.