Una buena limpieza junto a los insecticidas Killer son la mejor solución.
El primer paso es eliminar lo que atrae a los insectos como la comida, luego evitar dejar ventanas y puertas abiertas.
Aplicar Killer en los rincones del hogar, que gracias al efecto residual sigue matando de forma preventiva y en caso de ya contar con insectos, aplicarlo según las instrucciones de la etiqueta.